Este es un juego completamente inventado que unos amigos y yo sacamos de otro sistema de rol, aun así hace poco hicimos la primera sesión y nos convenció bastante, es un juego de superpoderes tipo MARVEL, mucha inspiración en comics americanos y héroes tópicos y añejos, en mi máximo esfuerzo por crear algo tan clásico que este a la altura de un juego así, decidí crearme a un tío con gafas de sol a todas horas, una gabardina (negra por supuesto), y sin falta, una camiseta de marbel (si, con b, por si nos denuncian y todo eso xD). Decidí crear a un personaje con muchos poderes y de desarrollo lento, aun así, en su trasfondo conseguí que no se notasen ninguno de ellos, así hace todo tipo de cosas espectaculares sin llegar a parecer sobrehumano, por supuesto un poco exagerado (viva el comic americano), en esta saga de historias pretendo relatar una larga noche desde el punto de vista de tres protagonistas, Jack, el policía que persigue a nuestro héroe, Joe, el antagonista, y por ultimo, el propio Max, contando su versión, la primera sera de la de Jack, aun no se cual sera la próxima (seguramente la que me de por hacer primero), mientras tanto, disfrutad de esta.
Es una historia mucho mas americana y actual, de armas de fuego, terroristas y polis, así que si no os gusta ese tipo de relatos no os recomiendo esta historia.
PD: sus poderes son 3: ralentiza el tiempo, incluido el, puntería mejorada (tanto que puede disparar a las balas que se dirigen hacia el), y reflejos sobre humanos (algo parecido al sentido arácnido, solo que con el puede calcular el porcentaje de peligrosidad de las personas de su entorno)
Diario de Jack
Esta iba a ser una
noche muy larga…la comisaria estaba hasta el cuello de trabajo y solo
quedábamos unos doce polis (cuatro de ellos con sobre peso por esas malditas
rosquillas) para sacar a esos malditos terroristas del gran banco Manhattan, cagados
del pánico cogimos hasta la última arma que pudiésemos llevar y las cargamos en
los tres coches patrullas que acabaríamos utilizando de cobertura.
Dejamos el coche más
grande para las armas pesadas y los
polis con sobre peso, en el mío íbamos yo, y dos de los agentes más idiotas de
este bendito país, el único en quien confiaba de los que conocía era John, ese
loco que no dudaba en tirarse de un edificio pegando tiros para capturar a su
presa con un sentido de la justicia preocupantemente exagerado, al menos no iba
a pegarme un tiro por error, a menos que le diese una razón para hacerlo…
Mientras que los
otros dos rezaban por sus vidas de papeleo y oficina que detestaban hace 5
minutos, yo conducía a toda velocidad por la ciudad con la alarma puesta, el
gran trafico de nueva york se apartaba en una sinfonía de insultos realmente
originales y dispares, aquello era un caos, John terminaba de comprobar su
rifle cuando divisamos las furgonetas negras de los ladrones armados:
-Jack, ¿no sería maravilloso volar el transporte de esos psicópatas
con sus madres dentro?
-Jajaja, ya te digo compañero, cuando acabe esta horrible
noche si seguimos con vida les enviaremos una nota de amenaza y un ramo de
flores por las molestias
-Me parece un buen plan, yo añadiría una tarta envenena…mierda
¿quién es ese desgraciado del tejado?, Dios, tiene un lanza cohetes nos tiene a tiro,
¡fuera del coche ya!
Eso fue lo último que
escuche antes de quedarme temporalmente ciego y sordo, suerte que salí del
coche rodando antes de que ese idiota disparase (con muy mala puntería por
cierto).
Al recobrar la
cordura y maldecir a todos y cada uno de los americanos vi ante mí la típica
escena que acaba con una viuda y los hijos de un poli huérfanos, uno de los que
iba en mi coche patrulla estaba calcinado detrás de mí, en un callejón a dos
metros de mi estaba el otro maldito cobarde a quien recomendaría la degradación
si salía de esta y tres de los obesos (hacia esos sentía demasiada pena como
para culparles). A 20 metros de mi estaba otro coche patrulla que cubría a John,
al último obeso (lo que me sorprendió gratamente) y a otros dos polis que
querían ganarse una medalla de honor, los dos restantes quien sabe donde
estarán a día de hoy (quizá en México, lejos del sargento).
Me levante y di
gracias por estar lejos del tiroteo al desmayarme, corrí hacia el coche y me
cubrí detrás de John.
-¡John, toda la
potencia de tiro está concentrada en nosotros, debemos separarnos y resistir
hasta que lleguen los SWAT, o el maldito ejercito!
-¡Está bien, tu y mi
amigo el obeso os quedareis aquí, yo y los otros dos nos iremos al otro coche
patrulla donde están las armas!
Eran tres en la
entrada con ametralladoras, 4 en la segunda planta con pistolas reglamentarias
y dos en el tejado con rifles de precisión, estábamos en mitad de la maldita
calle, en frente de la entrada y estábamos muertos, mientras dábamos fuego de
apoyo para que John y los suyos alcanzasen la cobertura vi como uno de los del
tejado se agachaba y volvía a levantarse con un maldito LAW al hombro.
-¡John, quítate de el
medio, os va ha hacer volar por los aires!
John se quedo paralizado
sin saber a que me refería cuando el misil salió en busca de su objetivo, cerré
los ojos y entonces paso, el misil exploto mucho antes de lo previsto, de hecho
convirtió en un rico puré a los dos desgraciados del tejado, mire a John que
corría desconcertado a la cobertura, al mirar hacia el otro lado casi le pego
un tiro al condenado, ni si quiera estaba mirándome, tenía unas gafas de sol en
plena noche el muy imbécil, una gabardina negra y una pistola recién disparada
en la mano.
-¡¿Quién diablos
eres!?
-Llámame Max amigo,
¿porque poco eh?
El fuego de los
confusos matones comenzó a acosarnos de nuevo, suerte que John ya estaba a
salvo.
-¡¿Qué demonios haces
aquí y que ha pasado con ese misil?!
-Vi que necesitabais
ayuda y decidí pasarme, he disparado al proyectil al inicio de su trayectoria
y…bueno, ya sabes el resto
-¿Que dices maldito
chiflado?, eso es imposible
-Ya, oye, ¿qué tal si
hablamos después?, tengo que hacer vuestro trabajo ¿sabes?
-¿Piensas avanzar
solo?, si te alejas un paso de esta cobertura yo mismo te disparare, ahora
estas bajo mi responsabilidad policial
-No, no lo harás
-Maldito idiota, no
me pongas a prueba
-No lo hago, tu
índice peligrosidad es bajo amigo, resulta que eres el poli bueno, nos vemos en
unos 15 minutos
Mientras le gritaba
verdaderas blasfemias el desgraciado salto del coche disparando como un poseso,
le dio a los 3 de la entrada sin inmutarse, incluso me pareció que varias balas
chocaban entre sí por la potencia de las ametralladoras, cuando sus pies
tocaron el suelo corrió como un diablo hacia la entrada, los de la segunda
planta ni si quiera le vieron (¿acaso sabía que no iban a dispararle?).
Los siguientes
minutos son muy confusos, cuando le perdí la pista los de la segunda planta
enseguida se refugiaron dentro (¿quizás fueron a ayudar a los de la primera?),
el eco de los tiros adentro no termino hasta pasados unos 10 minutos, en ese
banco hubo una maldita masacre, cuando estábamos a punto de entrar para ver qué
demonios ocurría, Max logro salir.
-¿Qué diablos has
hecho ahí dentro?
-Ya te lo dije,
vuestro trabajo
Cojeaba un poco, tenía
un corte en la pierna (¿cómo se hizo esa herida en medio de un tiroteo?), y aun
estaba recuperado el aliento, creo que le costó más de lo que tenía previsto.
-Mira no sé cómo,
pero creo que eres sospechoso y has ayudado a escapar a…
En ese momento John salía
de registrar el banco junto a los otros polis
-¡Jack!, están todos
muertos, este tío se los ha cargado a todos
-Imposible, ¿Quién eres?
No hubo respuesta…cuando
me gire ya se había marchado, corría como si algo realmente aterrador le
persiguiese por los tejados de los alrededores, lo que no sabía es que al darle
la mano cuando me saludo, le oculte un localizador en la manga de la gabardina,
no sé quién es, ni si es de los buenos, pero juro que le encontrare.
PD: como con Rodrigo, intentare actualizar esta entrada con una ilustración del personaje